La oración

¿Para qué sirve analizar, en sus partes, una oración?
Reconocer las partes de una oración nos permite expresar, en forma escrita, nuestro pensamiento, nuestra reflexión
sobre cualquier tema de discusión.                          
Silvia responde

 

 

 

 

 

 

 

Andando.
¿Cuándo?
¡Qué hermoso día!


Esta son oraciones que no se pueden separar en sujeto y en predicado.
Cuando decimos algo de alguna persona o cosa, se llama sujeto de la oración. Todo lo que decimos del sujeto,
se llama predicado.

En estas, en cambio: Ricardo lee el periódico de la mañana,
se puede separar en sujeto y en predicado:
(1)Ricardo (2)lee el periódico de la mañana.
(1) es el sujeto de la acción, único núcleo, por eso es simple. Si hubiera más núcleos, sería compuesto: Ricardo y su compañero de trabajo leen el periódico de la mañana.
(2) es el predicado, simple porque hay un solo verbo que concuerda con el núcleo del sujeto. Si hubiera más verbos, el predicado sería compuesto: Ricardo lee el periódico de la mañana y toma el desayuno.
Estas son oraciones simples porque tienen un solo sujeto.

 

El sol apareció de entre las copas de los árboles frondosos y las flores comenzaron a brillar con sus colores, pero de pronto, un viento huracanado cambió el paisaje, luego volvió la calma.


Esta es una oración compuesta porque tiene diferentes sujetos y varias proposiciones vinculadas mediante los conectores: y, pero, luego.

Proposición 1: El sol apareció de entre las copas de los árboles frondosos

Proposición 2: las flores comenzaron a brillar con sus colores

Proposición 3: de pronto, un viento huracanado cambió el paisaje

Proposición 4: volvió la calma

También hay otras oraciones compuestas (las subordinadas) que tienen conectores:

1. Pensá que vendrá pronto.
2. El árbol que veo desde mi ventana, alegra mis mañanas.
3. Salió cuando la lluvia se alejaba del lugar.
4. No sé si llegaré temprano.

Estas oraciones están compuestas por proposiciones (oraciones que dependen de otra oración) vinculadas internamente: son las  subordinadas.

1. Pensá (oración principal) que vendrá pronto, depende del verbo pensar (proposición subordinada)
 

2. El árbol alegra mis mañanas (oración principal) que veo desde mi ventana, depende del
sujeto: el árbol (proposición subordinada)
    También puedo decir:
    El árbol que alegra mis mañanas, lo veo desde mi ventana.
    Esto significa que se puede cambiar la subordinada, o sea que parte de la oración principal puede transformarse
    en subordinada, y la subordinada en oración principal.

3. Salió (oración principal) cuando la lluvia se alejaba del lugar, depende del verbo salir (proposición subordinada)

4. No sé (oración principal) si llegaré temprano, depende del verbo saber (proposición subordinada)

En estos ejemplos, podemos observar que hay dos (a veces más) verbos que están conjugados y que pertenecen,
unos a la oración principal, otros, a la subordinada.

Algunos nexos de las subordinadas son: que, quien, cual, donde, cuando, como, si, mientras.

 

 

 

 

 

RECORDAR:
En estas oraciones:

Hace (hacer) mucho frío.

Hubo (haber) guerras sangrientas.

Es (ser) temprano.

No hay (haber) nadie.                                                                              Silvia tomando el té

Observamos que no hay un sujeto reconocible, son oraciones impersonales y el verbo permanece invariable, no concuerda en número.

Veamos estos ejemplos:

Se oyen ruidos extraños.

No se sabía la verdad.

Observamos que en esta construcción pasiva con se,  sí el verbo concuerda con el sujeto (ruidos extraños, la verdad).

IMPORTANTE:

Las ideas que queremos expresar tienen una explicación, esta se evidencia a través de conectores:

porque, pues, dado que, en consecuencia, por lo tanto, así que, además, sin embargo

 

                                                                                                     

FIN